DÍA 1
El lunes 29, a las 5 de la mañana, nuestros chicos y chicas de 4⁰ESO, acompañados de sus profesores Isabel Regaña, Alejandro Boza y Cristina García, partieron desde Villafranca rumbo a Asturias para dar comienzo a su viaje fin de etapa.
Cargados de maletas e ilusión, hicieron la primera parada en el pueblo de Vegacervera, en León, donde pudieron disfrutar de un circuito multiaventura formado por diversas actividades: rocódromo, pruebas de equilibrio, tiro con arco…, aunque, sin duda, la actividad más atractiva fue la espeleología, gracias a la cual se pudieron adentrar en una cueva y recorrerla por dentro.
Tras reponer fuerzas con unos buenos bocadillos, partieron rumbo a Asturias, donde llegaron sobre las 19 horas. Allí en el albergue se distribuyeron en las habitaciones y pudieron disfrutar de un rica cena que puso el punto final al primer día de esta aventura.
DÍA 2
El segundo día de estos aventureros ha sido bien intenso y divertido. Tras un desayuno todos juntos en el albergue, partieron dirección Trescares para realizar barranquismo.
La empresa encargada de la actividad preparó a todo el grupo con el equipo correspondiente y explicó cómo se debía realizar para que saliera perfectamente.
Los chicos y chicas se divirtieron un montón y soltaron toda la adrenalina posible.
Ya por la tarde, tras una rica comida en el albergue, partieron para realizar la ruta del Cares. Aunque llovió un poco, se pudo realizar y disfrutar de unas vistas increíbles.
De vuelta al albergue, cena tempranito para poder ver luego en el hall el partido de semifinales de la Champions.
DÍA 3
Después del desayuno, el grupo partió en su tercer día rumbo a Arriondas para realizar el famoso Descenso del Sella.
Ataviados con sus trajes de neopreno, y tras unas indicaciones de los monitores sobre cómo manejarse con los remos, los chicos y chicas se deslizaron hacia el río para comenzar su aventura en la que pudieron disfrutar de una travesía súper divertida en un entorno incomparable.
Una vez terminada la actividad, ya preparados de nuevo con sus ropas, se dirigieron a la playa de Ribadesella para comerse el picnic cerca del mar y dar un paseo por la zona.
Después de esto, el autobús los llevó al precioso pueblo de Cangas de Onís, en el que pudieron visitar la ciudad y tuvieron tiempo para hacer algunas compras.
Ya para finalizar con el toque cultural, el grupo visitó la Basílica y la Santa Cueva de Covadonga y pudo ver la estatua de Don Pelayo, figura emblemática del reino astur, en torno a la cual escucharon a su profesora Isabel contar el inicio del reino astir y con él la expansión de los reinos cristianos hacia el sur.
Finalmente, cena en el albergue para reponer fuerzas y a descansar.
DÍA 4
El cuarto día de estos aventureros comenzó poniendo rumbo a Cantabria, concretamente a la población de Potes, donde pudieron realizar una degustación de quesos en la que aprendieron las características de los diferentes tipos y compraron para llevar a sus familias.
Después fueron hacia los Picos de Europa a los que accedieron a través del funicular y una vez allí se lo pasaron en grande disfrutando de las impresionantes vistas y tirándose bolas de nieve.
Ya para mediodía bajaron a Potes para reponer fuerzas con un rico picnic, que más de uno y una completaron con alguna comida típica en alguno de los bares de este bonito pueblo.
Tras un tiempo libre para que pudieron comprar algunos recuerdos se pusieron en marcha para ir hacia el albergue, no sin antes hacer una pequeña parada en el centro de interpretación de los Picos de Europa, que sirvió para entender mejor lo que habían visto in situ unas horas antes.
Para terminar y poner el broche final a la última noche, los profesores prepararon unos juegos en el hall del albergue y un pequeño refrigerio. Se lo pasaron en grande compitiendo unos grupos contra otros y bailando entre ellos.
DÍA 5
Después de la fiesta de despedida, tocó madrugar para realizar el camino de regreso a Villafranca. Pero no quisieron dejar pasar la oportunidad de aportar otro toque cultural al viaje y para ello aprovecharon para parar en Burgos y visitar el Museo de la Evolución Humana.
Allí, divididos en dos grupos, con sus camisetas regaladas por la empresa, y acompañados cada uno por un guía, pudieron conocer de primera mano los restos arqueológicos procedentes de los yacimientos de la sierra de Atapuerca, referente internacional en relación con el proceso evolutivo del hombre en sus aspectos ecológicos, biológicos y culturales en secuencia cronológica. Tras esto, accedieron a los yacimientos, donde, ataviados con cascos, y de la mano de un divertidísimo guía, pudieron ver in situ la Sima del Elefante, Galería y la Gran Dolina y aprender de forma muy amena e ilustrativa cómo se trabaja en una excavación.
Finalmente, llegaron a Villafranca con la sensación de haber disfrutado de unos días en los que han aprendido, no solo conocimientos, sino valores que se llevarán para siempre y han vivido una experiencia que tanto ellos como sus profesores nunca olvidarán.