EL RINCÓN DEL JARDINERO

LA PLANTA DE LA SEMANA XLI

by José Muñoz

Mimosa
Acacia dealbata.

Es un árbol de hoja perenne originario de las regiones del sureste de Australia y de Tasmania que se ha adaptado hasta tal punto a nuestro contexto bioclimático que se ha llegado a catalogar como potencial planta invasora. Muy resistente tanto al frío como al calor, esta planta no precisa de cuidados especiales, si bien prefiere los suelos silíceos y profundos así como la exposición a pleno sol; su crecimiento es rápido y vigoroso, como contrapartida no es una planta longeva (25 a 30 años), siendo conveniente disponerla en lugares alejados del paso, pues tras la floración libera una sustancia oscura a modo de melaza que ensucia el suelo.

Su verdadero encanto radica en su temprana y espectacular floración, pues a finales de enero y principios de febrero se cubrirá de infinidad de glomérulos (florecillas de forma esférica) de color amarillo, e intensamente aromáticos que inundarán de luz y color el jardín que aún dormita. Ciertamente es una planta que debemos controlar en el jardín, disponiendo de uno o dos ejemplares; y dada su potencialidad invasora, no plantarla en espacios de campos abiertos e incontrolados, ya que podría proliferar sin control hasta tal punto de competir con las especies autóctonas.

EL RINCÓN DEL JARDINERO

LA PLANTA DE LA SEMANA XL

by José Muñoz

HORTENSIA DE INVIERNO
Bergenia crassiflora.

Es una planta originaria de las regiones menos frías del sur de Siberia y de Asia Central que ha logrado adaptarse a nuestro contexto; desarrollándose favorablemente en las zonas más umbrías de parques y jardines. Se trata, sin duda, de una planta interesante, pues florece en vistosos racimos durante el rigor del invierno, liberando un suave y agradable aroma; tolera, por tanto las heladas (hasta -7ºC) y mantiene sus lustrosas hojas durante todo el año, mostrándose particularmente exuberante durante el verano.

En nuestra zona, de veranos extremos, conviene plantarla junto a muros orientados al norte, o bajo la protección de otros árboles y arbustos que le proporcionen sombra; precisa de suelos sueltos y húmedos, y se reproduce con facilidad a partir de rizomas, en otoño.

Color, luz, algo de aroma, bastante vistosidad y muy poco mantenimiento nos aporta esta curiosa planta que vino del frío.

EL RINCÓN DEL JARDINERO

LA PLANTA DE LA SEMANA XXXIX

by José Muñoz

CALÉNDULA
Calendula officinalis.

Es una planta herbácea originaria de la región mediterránea, muy generalizada por su uso ornamental para vestir arriates y macetas, existiendo numerosas especies y subespecies de este género. Tolera el frío, aunque las heladas fuertes pueden perjudicarla, por este motivo conviene plantarla, como muy temprano, a finales de enero; en verano será conveniente aportarle riegos frecuentes y evitar exposiciones directas al sol en las horas centrales del día. Por lo demás no precisa de cuidados especiales, suelo suelto y arenoso, mostrándose resistente ante las plagas.

Su floración suele iniciarse a mediados de febrero, perdurando hasta bien entrado el verano. Luz, color, sencillez y armonía nos aporta esta planta tan familiar, además de ofrecernos numerosas aplicaciones medicinales que van desde la cicatrizante a la vermífuga, pasando por la antiinflamatoria y el tratamiento de la conjuntivitis.

EL RINCÓN DEL JARDINERO

LA PLANTA DE LA SEMANA XXXVIII

by José Muñoz

PLUMERO
Cortaderia Selloana.

Es una gramínea de gran envergadura originaria del sur de Brasil y de las estepas de Argentina que se ha adaptado a nuestro ambiente sin ningún problema, llegando en algunos casos a considerarse planta invasora debido a su proliferación; precisa, por tanto de muy poco mantenimiento, pues tolera cualquier suelo, incluso los salinos, aunque los prefiere compactos y profundos, la exposición directa al sol no le perjudica y tolera tanto las heladas invernales como los rigores del verano, estación en la que será preciso proporcionarle riegos más frecuentes.

El encanto de esta planta radica en la faceta decorativa que posee, pues a lo largo de la primavera, durante todo el verano y el otoño, quedará vestida de abundantes y vistosas panochas que, a modo de grandes espigas, albergan sus diminutas flores, existiendo en ellas una original gama cromática que va desde el blanco intenso al rosado.

Se debe podar cada dos años hasta medio metro de la base aproximadamente, siendo muy sencilla su multiplicación a partir de la división del cepellón en invierno.

EL RINCÓN DEL JARDINERO

LA PLANTA DE LA SEMANA XXXVII

by José Muñoz

MADROÑO

Arbutus unedo.

Se trata de un arbusto de hoja perenne originario de los ambientes mediterráneos, que excepcionalmente puede adquirir porte de árbol si las condiciones del suelo y del ambiente son óptimas para su desarrollo. En nuestro contexto se puede utilizar como planta decorativa por las pocas exigencias que requiere, pues tolera cualquier tipo de suelo, aunque prefiere los silíceos y frescos, soporta la exposición directa al sol y también la semisombra, no le dañan las heladas y tampoco precisa de podas minuciosas.

Su faceta decorativa radica en su aspecto siempre verde, pero ante todo en sus flores y en sus frutos, pues en un mismo ejemplar pueden convivir simultáneamente durante toda la estación de otoño sus originales florecillas, los rojos frutos maduros y los frutos amarillentos que madurarán en el próximo otoño. Su madera, dura y resistente se ha utilizado tradicionalmente para fabricar objetos tallados y tanto sus frutos como sus hojas contienen principios activos para combatir diarreas, disenterías e infecciones de las vías urinarias.